Folia Theologica et Canonica 10. 32/24 (2021)
Ius canonicum
160 JOSE MIGUEL VIEJO-XIMENEZ la biblioteca de la Universidad de Gante18. Por su parte, aunque manejaron ICT —o, si se prefiere, conocian sus ensenanzas circa artem y circa librum—, los autores de los prologos QO, SVT y SVT3 comenzaron su explicación del ius canonicum sin una referencia explícita a la Teológia. Lo cual no significa que se desentendieran de la dimension sobrentural de la Iglesia, de sus cánones y de sus decretos. Sin apartarse dei esquema de los accesus ad auctores, el autor de QO se inspiro en Gayo y Pomponio para justificar por qué principiaba sus explicaciones con unas palabras sobre el origen del Derecho Digestum QO (...) in omnibus rebus animadverto id perfectum esse, quod ex omnibus suis partibus constaret: et certe cuiusque rei potissima pars principium est ,ex Dig 121 Gaius libro primo ad leges XII tabularum \ (...) itaque nobis videtur ipsius iuris originem atque processum demonstrare. [ex Dig. 1.2.2 pr. Pomponius libro singulari enchiridii] Quoniam in omnibus rebus adnimaduertitur id esse perfectum quod suis omnibus ex partibus constat exordium uero cuiusque rei potissima uel potentissima pars est ideoque mihi uidetur agendarum causarum formam et ecclesiastici iuris originem eiusque processum non esse inutile ignorantibus reserare. Este comienzo es propio de un juristas, no de un teólogo. Ahora bien, en lugar de desarrollar el terna anunciado, De origine uero iuris, el autor de QO cambio de argumento y dedico sus primeras reflexiones circa artem —en su caso, el ius canonicum, una parte dei ius— a una cuestión distinta: el origen de las formas de litigar, placitandi causa. El giro brusco de QO estuvo motivado por la consulta de ICT, cuyo primer párrafo reproduce completo, a excepción de dos frases: la ya citada sobre la inclusion de cánones y decretales en la Teológia, “Inter ceteras theologie disciplinas (...)”; y la que en ICT viene inmediatamente a continuación de la anterior, “Si quidem ad ecclesiasticas agendas et res decidendas sunt pernecessaria ordine placitandi ex legibus translato”19. Mientras que el lector de ICT está sobre aviso, el lector de QO queda desconcertado por la aparición repentina del origen de las formas de litigar. En ICT QO, la narración sobre el origen de las formas de litigar se construye con citas del Antiguo y del Nuevo Testamento: comienza en el paraiso (Gen 3, 12), continua en tiempos de Moisés (Deut 19, 15) y termina con el apóstol Pablo (1 Cor 6, 4). En ambas introducciones, la conclusion es la misma: “(Sic serie utriusque testamenti liquido constat)ICT (Sic utriusque testa-18 Kuttner, S., Repertorium, 14 y nota 1: Gent, Bibi, der Rijksuniversiteit, 55 (Kat. Nr. 288). 19 Los textos de ICT y QO en Viejo-Ximénez, J. M., Dos escritos, 282-283 y 285-289.